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lunes, junio 21, 2010

CARTA DE UNA FUNCIONARIA DE GRANADA A CARLOS HERRERA

To: herreraenlaonda@ondacero.es
Subject: Ya no quiero escucharte.
Date: Thu, 10 Jun 2010 17:21:01 +0200


Estimado Carlos:


Mis motivos para escucharte cada mañana no han sido otros que el placer de escuchar una información imparcial, coherente y objetiva, cualidades esenciales en el oficio de periodista pero que en pocos medios de comunicación españoles, y ahora creo que en ninguno, es  fácil encontrar.
He disfrutado también muchísimo de tus grandes dotes de comunicador y, sinceramente, me he divertido bastante oyéndote.
Y por eso lo siento mucho.
Siento mucho haber tenido que ver al final tu faceta más humana desde el punto de vista negativo. Ver como la imparcialidad, la coherencia y la objetividad han ido abandonando tus opiniones a medida que el tema de la crisis económica avanza. He soportado día tras día ver que, primero, lanzabas indirectas para que se "metiera mano" (lo siento, no se me ocurre ahora mismo una forma más correcta de decirlo) de una vez a los empleados públicos. Y, después, desde hace unos días, comprobar la satisfacción que te causa el hecho de que por fin el Gobierno haya adoptado esta medida que, entre otras, recorta el gasto público.
Querría hacer un inciso aquí. Parece que hay muchas personas que sólo pensáis en el gasto que ocasionamos a vuestros (nuestros también, no lo olvides), bolsillos. Olvidáis y os reís de la "PRODUCCIÓN" pública que es la que justifica este gasto. Es que ni pensáis en ella. No estoy hablando de altos cargos puestos a dedo que estropean más que arreglan y que no se irán, no lo dudes,  sino de los "curritos" que como en cualquier empresa trabajamos nuestras treinta y siete horas y media semanales, en muchas ocasiones en condiciones más que complicadas porque no contamos con los medios suficientes para poder estar a la altura de lo que se nos responsabiliza. Atendiendo a público cabreado e impaciente, cuidando y formando a vuestros hijos, responsabilizándonos de la salud de pacientes a los que  tenemos que ver en tiempo record, manteniendo y limpiando los espacios en los que vivís, protegiendo vuestra seguridad... En fin...
Igual tú no has necesitado de estos servicios porque puedes pagar medios privados: gestores, colegios, clínicas, médicos, seguridad, etc...., pero te aseguro que gran parte de la población, entre la que me encuentro, los necesitamos porque nuestro sueldo, los privilegiados que lo tenemos, no da para más. De los que no lo tienen, ni te hablo.
En fin, te he escuchado defender esta medida y....bueno, es tu opinión como la de muchas personas. Injusta, indicadora de un desconocimiento total de la labor que realizamos  (¿cómo la vas a conocer si, como te decía, poco tendrás que usarla?) y, por lo que a mí respecta, triste. 
Es de MI TRABAJO, del que hablas. El que crees que hay que remunerar menos. El que infravaloras en definitiva.
Pero en fin, he seguido escuchándote a pesar de todo porque no hacías más que manifestar eso, una opinión. Pero hoy voy a dejar de hacerlo. 
Hoy he comprobado que te has vuelto parcial, incoherente y subjetivo. 
Y ya no me parece interesante oírte.
Ahora que el Gobierno  ha dejado de mirarme y te mira a ti, que entiendo te cuentas entre las afortunadas personas que ganan más de 80.000 euros al año, te sientes indignado. Ves los "peros" de dejar a los ciudadanos con menos dinero que gastar y te parece que esa medida es injusta y poco útil, peor aún, que puede ser devastadora para los mercados.
Ya. ¿Para qué mercados? ¿Para las grandes firmas como Loewe? ¿Para la casa Mercedes? ¿Para el hotel Alfonso XIII? ¿Para restaurantes como Zalacaín o La Broche? Te aseguro que los que ganáis más de ochenta mil euros al año (declarados) no vais, por la subida de un punto o dos más en el IRPF a dejar de gastar en ellos. Ni lo van a notar, te lo aseguro. Ese mercado no se va a ver resentido. Y si no podéis vosotros, cosa que dudo, ya seguirán acudiendo a él los que no declaran las fortunas que ganan.  Siempre ha
sido así. A estas grandes empresas, nunca les fallan sus clientes.
Las tiendecitas de barrio, el bar que hay debajo de casa, los restaurantes normalitos, los hoteles de dos y tres estrellas, las gamas bajas de vehículos.... ese mercado que es el al que podemos acceder la mayoría de los españoles y del que viven otros tantos, como no es frecuentado por las personas que ganan más de 80.000 euros al año, igual sí que se ve afectado.
Tiendo a pensar, por la parte que me toca, que el recorte de sueldo de los empleados públicos, que sin ningún pudor ni conocimiento defiendes, sí que le va a hacer daño. Sí que le va a hacer daño la congelación de las pensiones. Llegamos a fin de mes justitos, así es que el dinero que nos quiten ahora, lo tendremos que quitar de nuestro consumo en estos establecimientos/empresas. A este recorte, por cierto, tenemos que añadir la subida del IVA y de la energía eléctrica, de las que tampoco nos libramos. Así es que los mil/mil quinientos euros que ganamos la mayoría de nosotros, una vez que nos apliquen el recorte salarial, como podrás comprender a poco que sumes, se nos irá en pagar la hipoteca/alquiler, la comida, el agua, la luz.... y poco más nos quedará para el consumo.
Carlos, todos podemos traernos al trabajo el desayuno de casa, no hay mucho problema. También podemos aguantar con los zapatos y la ropa del año pasado, tomarnos en casa la cervecita con nuestros amigos, comer 
con ellos también en casa en lugar de ir a un restaurante de vez en cuando y "aguantar" el coche un poco más. El problema será para el dueño del bar que vivía de servir desayunos a esa "panda de vagos" que somos los empleados públicos.
Para el dueño de un pequeño comercio de ropa o calzado, del restaurante sencillito, del hotel familiar, del supermercado de barrio, del concesionario que vende coches de ocasión.... Y para sus empleados. Este sector de mercado lo tendrá realmente bastante más difícil para sobrevivir que el de Loewe, Zalacaín, el hotel Alfonso XIII o la Mercedes. Y, como te comentaba, a éste mercado es al que accedemos la mayoría de los españoles.
Sin ninguna duda al menos, los funcionarios, como nos llamas a todos, y los pensionistas.
Mira, te voy a mostrar lo que entiendo yo por solidaridad, por responsabilidad, por coherencia y por justicia.
Yo no tengo ningún problema en apretarme el cinturón (si es que esto, como dudo, puede solucionar algo), para que con este dinero se puedan pagar subsidios de desempleo, gastos sociales y disminuir el déficit del Estado.
Para que podamos salir de esta situación caótica en la que la coyuntura mundial y la vergonzosa ineptitud de nuestra clase política (de todos los signos) nos han metido. Creo que es absolutamente necesario, justo y razonable. Pero hay dos aspectos que me harían sentirme más conforme y más tranquila.
Uno de ellos sería que de este esfuerzo que se nos exige a los pensionistas y empleados públicos no se escape nadie en este país. Que contribuyamos TODOS y TODOS arrimemos el hombro. Ricos y menos ricos. 
Empleados públicos y PRIVADOS. Todos los trabajadores y los dueños de grandes fortunas. No os pongáis a temblar los que ganáis más, que vosotros lo váis a notar relativamente poco.
El segundo aspecto que me haría no plantearme siquiera sentirme molesta con este recorte es que una vez que esta situación pase, que pasará como todas las crisis, se nos devolviera a TODOS también el poder adquisitivo que teníamos antes de padecerla. Que no sólo lo privado se beneficie de las épocas de bonanza mientras que a nosotros se nos mantiene, incluso yendo el pais bien, en la misma situación económica que en los momentos de "urgencia social". Que cuando pasen esos momentos, se nos restituya a la situación que teníamos antes de la crisis como a todo hijo de vecino. No pretendería más.
Con estas dos condiciones, entrego gustosamente mi dinero para contribuir a que nuestro país no se desmorone del todo. Para ayudar al que ahora mismo tiene la desgracia de estar en paro y a sus familias. 
Lo entrego con los ojos cerrados. Por solidaridad, por responsabilidad y porque lo considero justo. Pero tú y yo sabemos que no va a ser así. Que nunca ha sucedido así.
Carlos, todo lo que de justo tiene que yo tenga que contribuir al arreglo de esto, lo tiene de injusto el hecho de que no seamos todos los que lo hagamos. Que tenga que seguir contribuyendo a esto aún cuando "esto", haya pasado. ¿Me puedes dar una sóla razón para que no se toque a grandes sueldos que no han sido recortados; a las grandes fortunas? ¿Me la puedes dar para que las subidas salariales que se nos aplican después de las "crisis" se hagan en un porcentaje muy inferior al de la subida del IPC del año que toque y sobre sueldos congelados (ahora, reducidos) durante sabe Dios cuántos años esta vez?.
Esto no es demagogia. Es la realidad pura y dura. Creo que objetiva, imparcial y coherente. Como eras tú antes de ver peligrar un poco de lo mucho que tienes.
Si quieres, te puedo dar un consejo acerca de cómo pasar el mal rato de ver horrorizado que ahora te puede tocar a ti: Sencillamente, aprieta los dientes y aguanta. Es la medicina que tomamos nosotros, los "funcionarios", como nos llamas. Y ahí vamos, tirando "palante". 
Trabajando exactamente igual, con la misma responsabilidad, que cuando ganábamos más. Asumiendo por añadidura el trabajo de los compañeros a los que no se sustituirá por la crisis. Otro inciso: no querría pensar
que ahora te estás cuestionando la calidad del trabajo de PROFESIONALES de la medicina, de la enseñanza, de la gestión, de la investigación, de la seguridad..... no querría pensar que la ancestral imagen del "funcionario" de manguito vago, poco formado e inútil, aún está en tu mente. No puedes ser tan....limitado. Y, a todo esto, no todos somos funcionarios, te rogaría que nos denominaras bien si quieres generalizar. Te informo de que la designación exacta es empleado público. Algunos de nosotros tampoco tenemos la estabilidad en el empleo que tanto se envidia y que, al parecer justifica todo lo que se nos diga o haga. Hay muchos contratados laborales a los que también se les aplica, por cierto, la bajada de retribuciones y que también pueden ser despedidos cualquier día.
Y aquí acabo. Sé que esta carta no la vas a leer en tu programa, por su extensión y por su contenido. No importa, sólo quiero que la leas tú (de darle difusión, ya me encargaré yo misma) y que pienses un poquito, si te dignas, en lo que te cuenta esta humilde ex-"fósfora" tuya. Y que, si es posible, dejes de amargarles las mañanas a los TRABAJADORES públicos, aunque me temo que probablemente esta carta tenga el efecto contrario si tienes la soberbia que, no sé por qué, ahora te presupongo. Será por lo que me has cabreado y ojalá me equivoque.
Un saludo y que Dios nos pille confesados. A TODOS, Carlos.
Concha.


NOTA: Efectivamente, y como la autora presuponía, esta carta no fue leída en antena. Las verdades duelen.

4 comentarios:

Veckia dijo...

Este es un señorito con aires de grandeza.

Antes me caía bien, ya hace tiempo que menos...

la gente cambia, y él también, pero para peor, lo siento.

Muy buena la carta, sí.

Saludos.

E..P.. dijo...

Hola tengo que decir que me han dado este enlace una amiga para ver
y la verdad muy currao, estupendo,
verdades como puños, me ha gustado
su contenido. Es más si me lo permite me pongo seguidor suyo y le pongo en mi lista de blog, porque merece la pena de entrar en su blog y ver el buen trabajo de comunicación.
La verdad que este tipo nunca me ha gustado ni en la radio ni tv, ya que lo he visto siempre muy prepotente, falso,chaquetero y culebra.
Su intención de justificar su sueldo comunicando cosas que no es propia si no de un tío vendido para que no le quiten del puesto y
no ir al paro está claro.
Estamos sufriendo de la mafiocrácia
de la CASTA toda clase de abuso de poder y que defienden solo aquellos
que están también en ese mismo barco, como si no se iba a entender
tal demencia.
Yo con mis 50 años, cuatro oficio y toda mi vida trabajando como un mulo y me he quedado en paro hace poco, maldita la gracia que me hace
tener que vivir con 900 euros al mes y tener que vivir con eso mi familia y yo sin tener perspectiva de trabajar y más ahora con los despidos llamados ERE y despidos regalados para las empresas, encima no están contento.Por si fuera poco congela a más de cinco millones de jubilados la pensión, le baja los sueldos a los funcionarios y no solo a los funcionarios que en mi gremio hoy en día se trabaja a menos de la mitad del convenio.Así un largo etc
que ya da hasta vergüenza ajena.
Encima tenemos que aguantar sus derroches y sus corrupciones por no poner el robo legal que traen.
En fin con Rajoy no tenemos tampoco
nada resuelto esto lo arrastraremos durante años.
Un saludo cordial.

José Luis Valladares Fernández dijo...

Agradezco a la amiga Veckia que me hay puesto en la pista de este enlace. La carta dirida a Carlos Herrera es perfecta en todos los sentidos. Pensionistas y empleados públicos tenemos que hacer un esfuerzo para contribuir a una recuperación económica. Pero lamentablemente no va a servir de nada, ya que Zapatero, sigue gastando dinero a lo loco, muy por encima de las posibilidades de España. En esto es incorregible. Hasta de la 'hucha de las pensiones' saca dinero pra subvencionar a sindicatos iberoamericanos.
Otra cosa más. Como tu amiga Concha te equivocaste estudiando Derecho en Salamanca, yo también me equivoque estudiando filosofía pura, tambien en Salamanca. Tienes razón. Con periodismo hubieramos salido mejor.
Saludos cordiales

LAS RUINAS DE ISENGARD dijo...

Veckia, la verdad es que el Sr. Herrera ha sido una gran decepción, me recuerda su carrera a la de Luis del Olmo. Ambos empezaron siendo enormes comunicadores, y están evolucionando hacia posturas clasistas, de señorito de cortijo cordobés.
E.P., le agradezco sus palabras, ni que decir tiene que aquí todo el mundo es bienvenido, se trata de opinar y de proporcionarnos terapia mutua, que con estos políticos la vamos a necesitar...
Estimado tocayo, también le doy la bienvenida, pero discrepo de lo que dice: eso de que pensionistas y funcionarios tenemos que contribuir. Eso es muy relativo. Deberían empezar contribuyendo los bancos (a los que el año pasado se les puso una inyección millonaria de dinero público para "rescatarlos"), por ejemplo. A los que tienen sus patrimonios metidos en una SICAV. A los que se han forrado a base de poner ladrillos y vender pisos por su valor multiplicado por 10, a los que cobran el paro y están trabajando en negro en tres sitios, a los autónomos que nos han estado cobrando 100 eurazos por un desplazamiento de 10 minutos... Y luego ya veríamos. Creo que las casas hay que empezarlas por los cimientos, y no se puede empezar pidiendo sacrificios a los más débiles. Menos aún si seguimos gastando en chorradas, claro.